Un hombre va por el campo y se encuentra una lámpara, la frota y sale un genio.
-Soy el rey de los genios para el que nada es imposible. Por haberme liberado te concederé el deseo que me pidas.
-Ah, pues mira, yo vivo en Rincón de la Victoria y voy mucho a Torremolinos. Quiero un puente que una por el mar las dos poblaciones, con cinco carriles para vehículos por sentido, carriles de bicicletas y con vías para trenes balas que hagan el recorrido en 3 minutos.
-Uf, pero eso que me pides es complicadísimo, tú no sabes lo dificilísimo y costosísimo que es hacer ese puente. Mejor pídeme otra cosa.
-Bueno, pues ya que lo dices, siempre he deseado algo que me ha sido imposible: entender a las mujeres.
-¿De cuántos carriles has dicho que quieres el puente?
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