Diez chistes gráficos de tebeo (8)

 

Pitonisa

 

Después de follar

- ¿Tú hablas con tu marido después de follar?

- Si tengo saldo lo llamo, si no que se joda. 

¿La ropa se come?

Le dice Pepito a su mamá:

- Mamá, ¿la ropa se come?

- No, ¿por qué, hijo?

- Porque papá le dijo a la señora que limpia "Quítese la ropa que me la voy a comer".

El gallego y la computadora

 

Monja con hipo

 

El juez y la edad de la señora

 

El testamento del lechero

Muere un lechero. Al día siguiente los familiares contratan a un abogado para leer el testamento, y este empieza a leerlo:

- A mi hijo le dejo las casas del norte, a mi hija las casas del sur, y a mi esposa los edificios del centro.

Asombrado, el abogado dice:

- Caramba, señora, su esposo era rico.

- ¡Qué rico ni qué mierda! Son las rutas para repartir la leche.

Yo no sé

Pepito le dice a Jaimito:

- Yo no sabo.

Jaimito le responde:

- ¡Nooo! Se dice yo no sepo.

Una viejecita que los escucha discutiendo les dice:

- Miren, niños, ni se dice yo no sabo ni yo no sepo.

- ¡Ajá! ¿Y cómo se dice?

- Yo no sé.

- Y si no sabe, ¿para qué se mete?

Diez chistes gráficos de tebeo (7)

 

Traficante de órganos

 

Superfeliz

- ¡Hombre, Paco!, ¿cómo estás?... Te llamo porque no se te ve el pelo... ¿Qué tal la vida de casado?

- Nunca he sido tan feliz, tío.

- Te está escuchando ella, ¿verdad?

- Superfeliz.

- Ánimo, tío.

Lo logró

 

Diez chistes gráficos de tebeo (6)

 

Vacunando

 

Adivinanza

- Si aciertas una adivinanza, follamos.

- Vale.

- Un animalito verde, con ojos saltones, que vive en charcas, croa y salta...

- ¡El cocodrilo!

- ¡Acertaste!

Salvando la hostelería

- Hola, cari.

- ¿Dónde has estado?

- Salvando la hostelería.

- Te huele el aliento a whisky.

- ¡Un héroe, es lo que soy!

En el Carrefour

- Amiga, acabo de ver a tu marido en el Carrefour con una gorda.
- Hija de puta, soy yo. 

Diez chistes gráficos de tebeo (5)

 

El gatito

A las 3 de la madrugada suena el teléfono de un hombre rico que disfrutaba de sus vacaciones en el Caribe.

- ¿Patrón? Buenas noches, soy Juan, el capataz de su hacienda.

- Hola, ¿pasó algo, Juan?

- No, nada grave, patrón, solo quería avisarle de que su gatito se murió.

- ¿Mi gatito?

- ¡Sí, patrón, ese mismo!

- Pero... ¿qué le ha pasado al gato?

- Que comió un poco de carne podrida y le hizo daño.

- ¿Qué? ¿Y quién le dio carne podrida?

- Nadie, patrón, él se la comió de uno de los caballos que estaban muertos.

- ¡¿Caballos?! ¡¿Qué les pasó a mis caballos?!

- Pues verá, patrón, dos de sus caballos purasangres se murieron de cansancio, por tener que cargar tanta agua.

- ¡¿Qué?! ¿Y por qué cargaban mis purasangres agua?

- Verá... ¡Para apagar el fuego!

- ¡¿Fuego?! ¡¿Qué fuego?! ¡¿Dónde?! 

- En su casa, patrón. Una vela se cayó debajo de una cortina y prendió fuego a la casa.

- ¡¿Vela?! ¡¿Pero quién coño encendió una vela en mi casa, si tiene electricidad?!

- Fue una de las velas usadas en el velatorio.

- ¡¿Velatorio?!... ¡¿Qué velatorio?!

- El velatorio de su mamá, patroncito. Verá... ella llegó en la madrugada... sin avisar... y yo le metí un balazo pensando que era un ladrón.

- ¡¡NOOOOOOOOOOOO!! ¡¡NO PUEDE SER!!

- ¡Ya, ya, patrón, no exagere, hombre! ¿Tanto escándalo por un gato?

Sobre

- Hola, buenos días, vengo a matricularme en Ciencias Políticas.

- Muy bien, coja este sobre.

- ¡Coño! ¿Ya?

- ¡Es la matrícula, inútil!

- ¡Ah, bueno!

LGTB

- Papá, ¿qué significa LGTB?

- Lérida, Gerona, Tarragona y Barcelona: los que dan por culo, hijo.

- ¡Gracias, cuánto sabes! 

Porcentaje

 

El gordo

De niño fui el gordo de la escuela. Cuando crecí fui el gordo de la universidad. Cuando entré a trabajar fui el gordo del trabajo. Hasta que decidí hacer ejercicio y entré en un gimnasio. Ahora soy el gordo del gimnasio. 

Polvazo

- Es falso eso de que un polvazo después de discutir es una maravilla, mi mujer sigue enfadada.

- Es que tiene que ser con ella.

- Ah, vale.