Fin de semana

- Cariño, ¿te apetece que pasemos un fin de semana estupendo?
- ¡Vale!
- ¡Pues nos vemos el lunes!

Contraseña wifi

- ¿Me puede decir la contraseña wifi de su bar?
- Tómate una caña por lo menos, cabrón.
- ¿Todo junto?

El hipo de la monja

Una monja va al médico con un ataque de hipo:

- Doctor, tengo un ataque de hipo, desde hace un mes, que no me deja vivir. No duermo, no como, ya me duele el cuerpo de tanto movimiento compulsivo involuntario.

- Tiéndase en la camilla, hermana, que la voy a examinar -dice el médico.

La examina y le dice:

- Hermana, está usted embarazada.

- ¡Queeeee! -dice la monja- y se levanta y sale corriendo de la consulta con cara de pánico.

Una hora después el médico recibe una llamada de la madre superiora del convento:

- Pero doctor, ¿qué le ha dicho usted a la hermana María?

- Verá, madre superiora, fue una mentira piadosa. Como tenía un fuerte ataque de hipo, le di un susto para que se le quitara, y supongo que se le habrá quitado, ¿no?

- Sí, a la hermana María se le ha quitado el hipo..., ¡pero el padre César se ha tirado desde el campanario!

Sordo (Chiste de Calleja)

Papeleta

El niño le dice al cura en el colegio:
- Padre, ¿me compra usted una papeleta para la tómbola de la marquesa? El primer premio es un coche y cada papeleta vale 20 €.
- ¡Joder con la marquesa!
- Ese es el segundo premio.

Rueda desequilibrada

- Buenas, venía a revisar esta rueda porque dice mi mujer que se desgasta muy rápido.

- Estará desequilibrada.

- ¡Sí, como una puta regadera, igual que su madre!

Martínez

- Martínez, soy el comisario. ¿Qué ha pasado?
- Una mujer ha dado siete puñaladas a su hijo por pisarle lo fregao.
- ¿La habéis detenido ya?
- No, jefe, ¡todavía está mojado!

Con traje

- El mes pasado contraí matrimonio.
- ¡Contraje!
- ¡No te jode! ¡No iba a ser con chándal!

Elengendro

- ¿Qué nombre le habéis puesto al niño?
- Elengendro.
- Será Alejandro...
- ¡Tú es que no has visto lo feo que es!

Menú

- ¿Qué tenemos hoy para comer?
- Una reconstrucción de huevo y patata crujiente al toque de ébano.
- ¿Se te ha vuelto a quemar la tortilla, no?
- Como un tizón.

Benito

Una madre andaluza que llama a su hijo por la ventana:
- ¡Benitooooo!
Y vinieron todos.

Adán y Eva

Dos empleados del censo llegan a una casa y le preguntan al hombre:
- ¿Su nombre?
- Adán.
- ¿Su esposa?
- Eva.
- ¡Increíble! ¿Por casualidad también vive aquí la serpiente?
- Sí, un momento. ¡Suegraaaaaa, la buscan!

Vanessa

-Vanessa, ¿es cierto lo que dicen las vecinas, que te acuestas con tu novio?

-¡Ay, mamá! ¡Qué chismosas son las vecinas! ¡Me acuesto con uno cualquiera y ya están diciendo que es mi novio!

En el restaurante

-¿Qué tomarán los señores...?
-A mí me pone una langosta Thermidor y un cava Juve&Camps reserva de familia.
-¡Excelente decisión! ¿Y a su esposa...?
-Póngale un fax y dígale que me lo estoy pasando de puta madre...

El novio

- Hija, ¿tienes novio?
- Sí.
-¿Quién?
-¿Te acuerdas de Lorenzo, el hijo del farmacéutico, que es médico y sacó las oposiciones de notario, al que le robó la moto un yonki?
- Sí.
- Pues el yonki.

Pepino (audio)

Pepino

En una oficina árabe

- ¿Nombre?
- Abu Abdalah Sarafi
- ¿Sexo?
- Cuatro veces por semana.
- ¡No, no, no! ¿Hombre o mujer?
- Hombre, mujer... y algunas veces camello.

Separación

Se encuentran dos amigos y uno le dice al otro:
-Me separé de mi esposa.
-¡No me digas! ¿Y cómo lo hicisteis?
-Con un abogado. Él nos ayudó a realizar la repartición de bienes.
-¿Y tus hijos?
-Muy fácil. Decidimos que el que se quedara con más dinero se quedaba con los niños.
-¿Y quién se quedó con ellos?
-El abogado.

Pájaro moderno

Un abogado aparcando

Un abogado llegaba tarde a un importante juicio y no encontraba estacionamiento. Levanta los ojos al cielo y dice:

-Señor, por favor, consígueme un sitio para aparcar y te prometo que iré a misa todos los domingos del resto de mi vida, dejo las putas, el tabaco y la bebida, y dejo de follar con mi secretaria, que además está casada...

Milagrosamente aparece un lugar para estacionar, el tipo aparca y dice:

-No te preocupes, Señor, que ya he encontrado uno, ¡pero gracias de todos modos!

En una tienda

Una señora desagradable, fea, ácida, con malas pulgas y cara rencorosa entra en una tienda con sus dos niños. 
Les grita, insulta, regaña, estruja y tironea sin parar. 
El encargado de la recepción se dirige amablemente a ella y le dice: 
- ¡Buenos días señora, bienvenida a nuestra tienda! Tiene usted dos hermosos niños, ¿son gemelos? 
La malvada señora deja un momento de gritar y con una mirada entre agria y burlona responde al encargado: 
- ¡Por supuesto que no! El mayor tiene 9 años y el otro 7. ¿De dónde coño saca usted que podrían ser gemelos? ¿Es usted ciego o estúpido? 
Responde el encargado: 
- No señora, no soy ciego, ni estúpido... ¡simplemente no puedo creer que a usted se la hayan follado dos veces! 

La cartera

El ascensor amish

Un padre amish y su hijo de 35 años llegaron a un centro comercial. Estaban  maravillados con casi todo lo que veían, pero especialmente con dos paredes brillantes y plateadas que se abrían y cerraban constantemente.

El hijo preguntó:

- ¿Qué es eso, padre?

El padre, que nunca había visto un ascensor, respondió:

- Hijo, nunca he visto nada igual en mi vida. No sé lo que es.

Mientras ambos miraban asombrados, una señora gorda y vieja en silla de ruedas se dirigió a las paredes brillantes y presionó un botón. Las paredes se abrieron y la mujer ingresó a un pequeño cuarto. Las paredes se cerraron y padre e hijo observaron que se encendían alternativamente unos números ubicados encima de las paredes. 

Siguieron mirando hasta que se encendió el último número y, luego, los números comenzaron a encenderse al revés. Finalmente, las paredes se abrieron nuevamente y una rubia espectacular de 24 años salió del ascensor.

El padre, sin quitar sus ojos de la joven, dijo bajito a su hijo:
- ¡¡¡Ve a traer a tu madre!!!

El campesino y el burro

Un campesino pasa por la iglesia y el cura le invita a la misa. El campesino le responde:

- No puedo padre, ¿quién me cuidará el burrito?
- Dios te lo cuidará, hijo.

- Bueno - dijo el campesino y entró a la iglesia.

Cuando el padre se disponía a comenzar la misa dice:

- ¡Dios está con nosotros!

El campesino se levanta enfurecido de su

asiento y dice:

- Entonces, ¿¡quién me está cuidando el burrito!?

¿Qué cosa es?

¿Qué cosa es que cuanto más grande es menos se ve?
La oscuridad